El dormitorio es una de las estancias más importantes de cualquier vivienda. Debemos tener un espacio donde desconectar y dormir bien. Disfrutar de un buen descanso es necesario para poder afrontar el día, además tiene muchos beneficios para la salud. Hay muchos estudios que vinculan el hecho de dormir mal con enfermedades y molestias.
Las tendencias, los gustos y las necesidades cambian. Por eso, muchas veces queremos darle un aire nuevo a una estancia, pero sin necesidad de grandes reformas o cambiar todo el mobiliario. En el artículo de hoy, vamos a descubrir algunos consejos para renovar el dormitorio sin necesidad de cambiar muebles. Con los consejos que os damos en este artículo, podréis renovar vuestra habitación en pocos pasos y con grandes resultados.
Pintar la habitación
Una forma muy fácil de cambiar el aspecto del dormitorio es cambiar el color de las paredes. Los colores cálidos son más agradables y dan sensación de amplitud: colores crema, ocres, blanco roto o amarillos. Para la pared del cabezal de la cama podemos apostar por algún color fuerte como el gris o el azul marino. De esta forma, jugamos con el espacio y las paredes no se verán tan monótonas.
Renovar la iluminación
Cambiar las lámparas de las mesillas de noche y del techo es otra forma de rediseñar el dormitorio. También podemos cambiar o añadir puntos de luz para que se vea diferente cuando vayamos a descansar. Si tenemos suficiente espacio, podemos crear un punto de lectura e incluir un nuevo punto de luz.
Cambiar la distribución
Si el espacio permite una redistribución tenemos muchas posibilidades de cambiar por completo el dormitorio. Con un cambio de distribución podemos conseguir una habitación totalmente nueva.
Cambiar la orientación y el lugar de la cama nos permitirá disfrutar del dormitorio desde otro ángulo, obteniendo una perspectiva nueva de la habitación. Los armarios empotrados serán imposibles de cambiar de lugar, pero todo lo demás nos permite jugar con el espacio y conseguir una nueva distribución en que nos sintamos a gusto.
Nuevos cojines y textiles
Cambiar las fundas de los cojines y las sábanas nos aportará sensaciones nuevas. Si normalmente apostamos por colores neutros y textiles lisos, podemos apostar por estampados coloridos y originales. Con un simple cambio de la ropa de cama, veremos como toda la habitación tiene un nuevo aire.
Otra opción para que la habitación se vea diferente es poner o cambiar la alfombra. Si elegimos una suficientemente grande que abarque una gran cantidad de la habitación, se convertirá en protagonista y parecerá que hayamos cambiado el suelo.
Reutilizar muebles de otras estancias
Si tenemos muebles que no usamos en otras habitaciones como taburetes, armarios auxiliares, lámparas, espejos o cuadros podemos utilizarlos para decorar la habitación. A los muebles les podemos dar una capa de pintura para que sean del mismo color que la cama o el armario. Los taburetes los podemos utilizar como mesillas de noches o como mueble auxiliar para poner una planta de interior para purificar el aire.
Son muchas las opciones que tenemos a mano para poder disfrutar de un dormitorio nuevo sin necesidad de desembolsar una gran cantidad de dinero en reformas o muebles. Es normal que tras un tiempo nos aburramos de la decoración y queramos darle un nuevo enfoque. Si, por el contrario, el problema es que el dormitorio se ha quedado pequeño y necesitáis más espacio, os recomendamos visitar nuestra web y descubrir toda la cartera de productos. ¡Seguro que encontraréis vuestro piso ideal!